El conjunto de tubos del circuito de sangre extracorpóreo consta de dos partes, a saber, arteriales y venosas, que se usan durante la diálisis y se unen con fístula y dializador.
El material blando y que no se retuerce evita una mayor presión o inestabilidad en el circuito.
Estos juegos de tubos están diseñados para que el paciente conecte un sistema externo que extrae la sangre del paciente al dializador.
Para un solo uso, línea arterial en rojo: línea venosa en azul; esterilizado en gas EO.
La cámara de goteo de la línea venosa contiene un filtro para evitar que el coágulo ingrese en la vena del paciente.